La caries es una enfermedad muy peligrosa para la salud y el bienestar de tu boca. Sin embargo, ¿sabías que puede afectar al bienestar general de tu cuerpo e incluso a tu corazón? Te lo contamos todo en este post.
Toca visita rutinaria con el dentista, y este te dice que hay que empastar una muela porque la tienes infectada con caries. Pero a ti no te duele por lo que decides esperar un mes. Este mes se convierte en seis meses e incluso un año hasta que ¡crack! Se te rompe la muela. Un dolor agudo -producto de la llegada de la caries al nervio- sucede por toda tu boca. En el dentista te practican una endodoncia -lo que se conoce como matar al nervio- y te reconstruyen la muela, o te realizan un implante. Sin embargo, en este punto ya es tarde, la caries ha alcanzado el nervio de tu muela, puerta de entrada al riego sanguíneo de todo tu organismo. En este punto es vital que tu odontólogo o médico te mande un tratamiento para remediar este problema, sin embargo, hay ocasiones en las que la caries entra en el organismo a través del nervio dental sin que nos demos realmente cuenta -por eso desde aquí, recomendamos visitar al dentista a la mínima molestia-.
Es entonces cuando vienen los problemas: según la Universidad de Virginia, este tipo de problemas bucodentales aumentan en un 86% la probabilidad de desarrollar neumonía, cosa que se solucionaría visitando de manera regular al dentista.
Además, según la Asociación Americana del Corazón, las bacterias de la caries que llegan al nervio dental y penetran al torrente sanguíneo del cuerpo, pueden provocar endocarditis, arterioesclerosis y accidentes cerebrovasculares, al adherirse a las paredes internas de los vasos sanguíneos y a las válvulas del corazón.
En el papel, estos datos pueden resultar alarmantes. Sin embargo, con una correcta higiene bucodental, así como una rutina de visitar a tu dentista una o dos veces al año para una revisión, este post se queda en eso; un post curioso que leíste.