La retracción de encías es un problema muy común a día de hoy, no necesariamente ligado a la higiene bucal que mantenemos. Las malas ortodoncias, traumatismos e incluso un cepillado demasiado intenso puede hacer que nuestras encías se retraigan.
Aunque puede afectar a niños y adolescentes, la retracción de encías es más que común en adultos, pero que no cunda el pánico, con este post vamos a darte unos cuantos consejos que ayudarán a solucionar este problema, o por lo menos, a impedir que se convierta en algo más grave.
Milenrama: La milenrama es una planta con propiedades anticoagulantes, antiinflamatorios y analgésicos. Para aprovechar esto, se extrae el jugo de sus hojas y se masajea la encía afectada con este. También puedes hacer un té de milenrama para hacer gárgaras, vertiendo agua hirviendo sobre un puñado de flores frescas de la milenrama o 1-2 cucharadas de esta hierba seca y dejar remojando durante 15-20 minutos. Acto seguido debes colarlo y beber el té cuando se haya enfriado.
Té Verde: El té verde ha demostrado mejorar la salud dental con su uso regular, debido a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Según varios estudios, consumir esta infusión de manera regular reduce la posibilidad de padecer una enfermedad periodoncial, además de ayudar a reducir la inflamación de las encías y mejorar la fijación de los dientes.
Aloe Vera: El Aloe Vera es una planta cuyo gel, obtenido de sus hojas, posee propiedades antiinflamatorias y regenerantes. Es muy sencillo de usar, ya que solo necesitas romper una hoja de Aloe y frotarla con la encía afectada. Puedes repetir este proceso tantas veces como quieras.
Vitamina C: Una deficiencia de vitamina C puede causar inflamación de las encías y sangrado. Es por ello que aumentar la dosis diaria de vitamina C es una buena idea para solucionar este problema. Existen multitud de suplementos de vitamina C, aunque desde aquí te recomendamos que uses métodos naturales tales como frutas y verduras ricas en esta vitamina.